Reflexiones

Marco A. Muñoz Campos
ESC. SEC. TEC. 

Este ciclo escolar inicie en la secundaria técnica #60 de Cd. Juárez, Chihuahua, después de 16 años de laborar como docente en la escuela secundaria técnica # 48, también de Cd. Juárez Chihuahua.
Me di cuenta de la gran diferencia que hay de una escuela a otra con relación a la problemática social y económica que envuelve el entorno de cada una de ellas.    

Tuve que cambiar de manera radical la manera de dirigirme a los alumnos y padres de familia, así como de dar las clases y las practicas de laboratorio. Sin embargo ha sido una experiencia muy agradable, he aprendido mucho, ha sido un gran reto del cual he salido avante, no sin dar algunos tropiezos que llegaron a desestabilizarme por momentos, 

Vi en este bimestre que es necesario y saludable el cambiar de lugar de trabajo, pues oxigena la sangre. 

Las personas que creamos antigüedad en algún centro de trabajo, de alguna manera, estamos adquiriendo cierto arraigo, a tal grado que llegamos a  pensar o sentir que la organización del mismo, si no es como nosotros lo deseamos, esta mal estructurada. Podemos llegar a sentir cariño excesivo por los alumnos, ya que la comunicación que se tiene con ellos y con los padres de familia puede ser de muchas generaciones, lo que da la confianza de llamarles la atención con firmeza y mantener la disciplina sin ningún esfuerzo. Pero, el profesor se va quedando en un estado de confort que, la verdad, no es para nada benéfico pues la docencia es una actividad dinámica que requiere de constantes cambios.

El haber llegado a la secundaria técnica # 60 despertó en mi al docente que por mucho tiempo había quedado pasivo. No con esto quiero decir que estaba sin hacer mis labores docentes, si no que necesitaba la adrenalina de trabajar con jóvenes diferentes, con padres de familia nuevos a los que mostrar mi manera de llevar a cavo mi trabajo.

Como ya lo había mencionado, en un principio, el trabajar con gente nueva, con otra dinámica genero en mi un reto muy grande, un reto que se presento con varios infortunios: alumnos con un grado mayúsculo de indisciplina (groseros, queriendo enfrentar al profesor, sin reglas bien establecidas, queriendo parar la clase con bromas o comentarios absurdos, etc.) Esta situación me movió el "tapete" y a partir de estas situaciones modificar las planeaciones, crear nuevas reglas de trafico; padres de familia demasiado consentidores (se molestan si uno les llama la atención a sus hijos, no puede dejar a los alumnos a trabajar extra por que se molestan, etc.)

Sin embargo, el trabajo que se realizó con los alumnos fue lo que acerco a los padres a platicar y a integrarse en la dinámica.

A final de cuentas, el resultado que se obtuvo fue motivador, espero iniciar el siguiente ciclo escolar 2015-2016 un poco mas relajado pero poniendo en practica las experiencias adquiridas en este ciclo pasado. 

Gracias a los padres de familia y a los alumnos de la tec. 60 por permitirme trabajar con ustedes y aun mas, permitirme mostrar mi trabajo y llevarlo a cavo.



   


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